REGRESO

Hola gente guapa!!!

Madre mia cuánto tiempo sin pasar por aquí!!!!! La verdad es que necesitaba un respiro y el 2017 empezó fuerte, así que necesité un patrón y la desconexión del blog era imprescindible. Realmente me he acordado mucho de él y eran muchas las veces que me ponía delante de él para retomarlo pero nunca tuve éxito, por falta de tiempo o cansancio... en fin aquí estoy aquí de nuevo intentaré retomar el ritmo poco poco.

Hoy simplemente os dejo, después de echar la vista atrás, hacia el 2017, unos cuántos puntos que me han venido fenomenal el año pasado y que seguirán en mi directriz de vida este 2018.
¿Compartireis alguno conmigo?

1- El mar. Al fin he encontrado mi rincón, mi paraíso particular. Un pequeño pueblo de Huelva, con poco vida, la justa par mi, en invierno y vida , mucha vida en verano. Con tan sólo un par de días allí recargo pilas para mucho tiempo. Estoy deseando volver a #miparaisoparticular

2- El rojo. Me encanta este color, me gusta y por qué no decirlo me siento favorecida y fortalecida con él. Es un color de mucha fuerza y energía. Así que seguirá dentro de mi armario. Mi última adquisición esta biker roja #todoalrojo

3- Viajar. Me chifla, sobretodo los viajes de 4/5 días. No importa si son dentro de España o al extranjero, el caso es hacer la maleta. Mi último destino ha sido #berlin

4- Kenzo. Mi mascota, mi amigo, mi compañero de piso desde hace 10 años. Me gusta que duerma conmigo, que me despierto por las mañanas con lametazos y que ladre como loco cuando llego a casa.

5- Mi familia y mi marido. Saber que pase lo que pase nunca estoy sola y que siempre tendré unos cuantos hombros sobre los que llorar

6- Sobretodo darme cuenta que tengo el poder de poder decidir sobre mi vida lo que a mi me apetezca. No soy ni más ni menos que nada, sólo soy como soy , si te gusta bien y si no mira hacia otro lado, cruzaté de acera o simplemente intenta ignorarme. Si no me interesa tu vida ¿por qué  te tiene que preocupar las mía? Haré mi vida como mejor crea conveniente. Y cada uno deberíamos hacer lo mismo ¿verdad?



Besos, Rebeca